CHAINMEN. A mi manera, sin cadena y con pedal

O como frustraron mi incipiente vena literaria.

O como activaron mi desidia por la gramática

Siendo yo un crio de corta edad y estando en clase de gramática, el profesor (Religioso), nos puso como trabajo para el fin de semana, hacer un pequeño relato, teniendo como tema, la vida de un pescador

Como mandan los cánones o el miedo al castigo, ese lunes todos teníamos nuestro pequeño relato.

Comenzamos la clase leyendo cada uno el suyo, casi todos los relatos estaban escritos en “indio” como era de esperar, debido en parte a nuestra edad.

Llegado mi turno, que era de los últimos, comencé a leer mi relato el cual se ambientaba en el puerto de Santurtxi, en un atardecer invernal con fuerte tormenta.

Debía de resultar interesante, ya que todos escuchaban atentamente ¿De que parte de mi cerebro sacaría semejante historia y palabrería? Esa zona creo que jamás la he vuelto a visitar.

Todavía recuerdo después de 50 años uno de los pasajes de aquel relato ”Una vez efectuado el atraque, aquel curtido pescador envuelto en su frío traje de agua, que ocultaba su fornida anatomía, coloco la pasarela, cargo con su cesta de pescado al hombro y cuando pasaba por la cimbreante tabla que le servia de pasarela, un rayo ilumino su mayestática figura, dejando ver bajo el gorro su enjuto y curtido rostro con agudos ojos y finos labios, que denotaban…..”

La termine y el profesor sin salir de su asombro me felicito efusivamente ¡Joder la que se armo! Todos decían que la había copiado de algún libro. Yo me defendía diciendo que era mía, que no la había copiado, que no había libros que contasen cosas de Santurtxi No hubo manera de convencerles, no tanto al profesor, como al resto de la clase, pero el cachondeo fue sublime cuando uno de la clase (se tu nombre y me quede con tu cara) se le ocurrió decir, que yo tenia una hermana mayor y ella era quien me la había escrito

¡Se jodio la marrana!, abucheo general y un enorme cero para el menda.

En esos momentos asesinaron mi afición por la literatura, me divorcie de la gramática y me traumatizaron para siempre. Desde aquel día y hasta hoy, solo le escribí una carta a la novia y lo mas que he escrito por mi profesión es poco mas que títulos de planos y un grueso manual para el manejo de una aplicación que realice, pero que no cuenta, por estar escrito en “Cochise” y basado en imágenes. Siendo desde entonces mi medio habitual de comunicación, las imágenes, los dibujos y la expresión oral

¡Maldito profesor! Ya que era religioso, podía haberle preguntado a Dios y hubiese sabido que lo había parido y escrito yo

Bueno en otra ocasión contare en que se inspiro aquella precoz y ultima redacción, de momento me sirve como burda justificación de mi gramática trapera